lunes, diciembre 18, 2006

Último examen...


Creo que hoy he hecho un examen notable, por no decir excelente...

El último examen de mi carrera ha sido: ARTE DE ENTREGUERRAS, como se llamaba la asignatura en sí.

Kandinsky, Klee, Otto Dix, Picasso, René Magritte, Le Corbusier, Ozenfant, después de Renoir, Rousseau, Monet, Manet, Turner o Constable... en parte, muchas de sus ideologías artísticas y conceptuales nacen de Goya, nuestro gran artista (y no me critiquen lo de nuestro porque la gente suele decir nuestro grupo de fútbol, que es bastante más horroroso...), primer pintor del rey Carlos IV. Éste, caracterizado por etapas divergentes, concebió ideas que procrearon el Impresionismo, Expresionismo, Cubismo, Art Nouveau, Metafísica, Dadaismo, Realismo Moderno, Futurismo, hasta el Pop Art.

Colores chillones, más bien poco neutros, que expresan en formas deformadas la realidad más latente, reflejo de una sociedad subersiva y horrorizada por las guerras, dan personalidad a la mayoría de ellos. Líneas poco definidas, así como estructuras simplificadas al utilitarismo y funcionalismo, a veces, del objeto a exponer, sería otro aspecto a destacar. El concepto en sí, en contraposición del resultado de la obra artística, supone una de las mayores innovaciones, despojándose de las Academias, las normas y las convenciones tradicionales. La liberación condujo a la introducción de las mujeres, siendo este arte accesible a algunas de las mejores madres del arte moderno, como Münter, Hanna Höch o René Magritte.

Mucho es lo que he aprendido nuevamente en mi etapa de madurez (guiño a los que piensan que soy infantil, que no excluye la madurez), hasta límites insospechables, como mi obsesión por pintar el techo de mi comedor con pechos, tetas, melones, como carretones sonrosados, de carne viva y tersa, como los de las Tres Gracias de Rubens...

Ahí queda esta breve reflexión sobre el arte a estas alturas de mi carrera.

No hay comentarios: